LA lluvia que ha lavado las naranjas, las últimas naranjas perezosas, la limpia, la que viene ya sin barro. Y esas naranjas que la merecían sólo por esperar hasta el invierno, como merecen todos los que esperan.
Julio Martínez Mesanza – La merecían

LA lluvia que ha lavado las naranjas, las últimas naranjas perezosas, la limpia, la que viene ya sin barro. Y esas naranjas que la merecían sólo por esperar hasta el invierno, como merecen todos los que esperan.